divendres, 21 de juny del 2013

Bois de Bologne y Parc de l'Oreneta: por encima de las infraestructuras


Si consideramos la ciudad desde la óptica del conflicto entre urbanidad y infraestructura, París y Barcelona tienen mucho en común. En la metrópolis parisina, el périferique es un anillo que circumbala el municipio y lo limita -aunque en realidad constituye mucho más que una frontera política, sólo hace falta observar el estado de los banlieues exteriores a esta ronda y ver que no gozan de los mismos privilegios que los del interior-. En Barcelona, la ronda limita con la montaña y con el mar, y no tiene este carácter de frontera social tan marcado.

Los esfuerzos por integrar las infraestructuras en la ciudad y así borrar las cicatrices que fragmentan el tejido se hacen patentes en las operaciones urbanas que se van llevando a cabo, a lo largo de los años, en ambas ciudades. Hay espacios que permiten se atravesados con mayor facilidad, y los parques urbanos son un ejemplo. Aquí tenemos el Parc de l'Oreneta, que constituye el tramo soterrado más largo de la Ronda de Dalt, mientras que en París el Bois de Bologne esconde, a tramos, la mayor parte de la gran infraestructura que lo atraviesa.

(Mapa de los puentes que atraviesan el périferique en la zona del Bois de Bologne, y imágenes de Barcelona y París en los tramos en que se soterran las infraestrtucturas)






dijous, 20 de juny del 2013

La Défense y Diagonal Mar

Durante estos últimos años hemos oído mencionar la teoría de la polarización como concepto aplicado al campo del urbanismo. ¿A qué se refiere el término? Seguramente abarca cuestiones muy amplias, pero una de ellas es relativamente fácil de comprender cuando uno compara Champs Elisées y la Avenida Diagonal.

Tratándose de dos avenidas vertebradoras de ambas ciudades, con un final hace unos años idefinido, inacabado o inexistente, los planes urbanísticos que se ocupaban de las zonas trataron de constituirlas como hitos, como metas, como polos con una intensa actividad.

La Défénse llavaba años bajo planificación, y un ejemplo es esta imagen de 1965. Sea como fuere, el proyecto pretendía concentrar la actividad económica al final de la gran avenida Parisina, y así activar la circulación en el último tramo de su eje.

 

El fórum, además de contribuir en una planificada operación especulativa, comparte en este sentido las mismas intenciones: crear un centro económico y de servicios dotado de suficientes reclamos como para que la actividad se traslade al final de la diagonal, y así activar todo un tramo que parte desde glorias y cuyo movimiento, hace un par de décadas, brillaba por su ausencia.
 







Quartier Massena i La catalana

Existe un barrio en París, denominado Quartier Massena, cuyo paralelismo con la nueva Catalana de Barcelona radica en cuatro elementos: tábula rasa, río, línia ferroviaria y infraestructura viaria. En efecto, son barrios construidos de nuevo en terrenos periféricos, que limitan con el río -salvando las diferencias entre en Besós y el Sena- y embebidos entre grandes infraestructuras viarias y línias ferroviarias, que fragmentan su conexión con los respectivos centros.
(Imágenes de ambos barrios en París y Barcelona)


Les Jardins des Grands Moulins, de 12.000 m2 de superficie, se extienden sobre una interesante sección transversal que resulta de los distintos niveles de los túneles ferrociarios, conformando una zona protegida del viento y bien orientada de cara a los nuevos equipamientos y al Sena.

Este espacio se sitúa en el centro de este gran barrio de alta densidad, y permite que los edificios situados en las manzanas de su perímetro participen de él. Portzamparc, el arquitecto que ha coordinado este plan urbano, propone una tipología de manzana abierta con una ordenación que, a la vez que se mantiene a raya con la calle, se relaciona con el parque a través de la discontinuidad en sus volúmenes y sus espacios interiores. La propuesta cuenta con una amplia multiplicidad de usos, ya que el 35% de la superfície construida está destinado a oficinas, un 33% a usos universitarios, un 11% al comercio y un 20% al uso residencial. La heterogeneidad compositiva del barrio es resultado de los treinta despachos de arquitectura que han participado en su diseño, otorgando a cada manzana su distintivo e identidad.

A esta novedosa configuración del barrio se ha añadido a posteriori la línea de tranvía T des Maréchaux o TMS, cuyo recorrido resigue el perímetro de la ciudad. Como ocurre en otras urbes, el tranvía ha sido un medio de transformación del paisaje y las avenidas que atraviesa, recualificándolos en mayor o menor medida. (Maqueta del barrio e imagen actual)

 Las actuaciones en zonas próximas a ríos, riberas, espacios ferroviarios o infraestructuras viarias son recurrentes en muchas ciudades, incluída Barcelona.

En nuestra ciudad, hay un barrio que recientemente ha sido expropiado y en él se está desarrollando un nuevo complejo edificatorio. La estrategia, sin embargo, no cuenta ni mucho menos con la riqueza formal ni la mezcla de usos del barrio parisino: las manzanas se traducen a bloques aislados, con una homogeneidad formal evidente, sin lugar al replanteamiento del polígono tradicional de vivienda.. en definitiva, una rotundidad volumétrica y programática que resulta, en comparación con Massena, francamente pobre. (Imágenes de La Catalana actualmente y del plan parcial para la zona completa)





Canódromo de Meridiana y The Vicksburg


Cuando fuimos al Canódromo de Meridiana, que era insuficiente. El edificio era interesante, pero no es impresionante, y no había como una pista de carreras de perros. Edificios caen en desuso, todo el tiempo, por supuesto. A veces se construyen en el momento económico equivocado, o alguna otra cosa mala suerte. Sin embargo, con el Canódromo de Meridiana,  yo no veo cómo el edificio era lo suficientemente interesante para estudiar, como para compensar su falta de función. Sé que esto es duro decirlo, pero no me impresionó como un edificio que fue una tragedia que cerrar debido a su belleza. Para mí, la verdad, la parte más interesante de la era de las marcas dejadas por las aves que habían volado por la ventana. Mientras recubierta de polvo, ya que era, bastante había volado en él, y lo suficientemente fuerte, para dejar varios cuerpo distinto y las impresiones del ala, hasta el punto de que se podían ver las plumas individuales.


Me alegré al saber que el edificio está siendo renovado como un centro de arte. El lugar tiene buena luz, un diseño abierto y una buena ubicación para un centro de arte. Creo que va a servir a su nuevo propósito mejor que su edad.

Pensando en edificios que han sido re-utilizados, uno específicamente de Vicksburg viene a la mente. Hay un viejo hotel llamado The Vicksburg que se cerró hace unos años y se ha convertido ahora en apartamentos. 


La ciudad cuenta con muy poco dinero, por lo que el edificio nunca fue completamente renovado. Se acaba de arreglar un poco y limpiar, y teniendo en cuenta las nuevas esclusas. El novio de mi hermana en un tiempo vivió en el apartamento más alto, y aparte de su propio desorden, las habitaciones estaban cayendo a pedazos. Había lona y cables colgando en el cuarto de atrás, y las paredes desnudas, y un balcón de las clases donde una parte de la pared había desaparecido. 


Era muy cómodo, por lo que sus efectos ya que los jóvenes se fueron, pero no estoy seguro de que el edificio nunca será completamente al código. Sin embargo, como Canódromo de Meridiana,  en este momento que se adapta mejor a su nuevo propósito de su original.






dimecres, 12 de juny del 2013

TRANSATLÁNTICO_walden





Mahón es una ciudad muy pequeña, aun siendo la capital de Menorca. A parte de su centro histórico, la ciudad sólo ha experimentado una ampliación colonial durante el siglo XVIII y una pequeña periferia industrial y otra de vivienda de baja densidad, que ya he comentado en posts anteriores. Sin embargo, cada año visitan a ciudad alrededor de un millón y medio de personas. Su estancia transcurre entre la tierra firme y a bordo de algún crucero que escale en el puerto. Estos grandes buques equivalen a microciudades con multitud de habitaciones como pequeñas celdas y todos los servicios y espacios comunes en su interior. Como una gran máquina de habitar.




Le Corbusier, en vers une architecture ya expresaba su admiración por el modo de vida que se establecía en los transatlánticos diseñados para habitar de forma colectiva. El Walden de Bofill es como un gran transatlántico pensado para intensificar las relaciones entre los ciudadanos más allá de la casa. “Se trata de llegar a definir todo un modo de vida actualizado. Hacer toda la redefinición de los problemas de la vida cotidiana”.


PERIFERIAS


                                          Plaça Europa

El imponente crecimiento que Barcelona experimentó en el siglo XIX y XX tras la revolución industrial provocó la necesidad de construir grandes polígonos residenciales que permitieran alojar toda la mano de obra que llegaba de toda España. Se construyen los edificios de viviendas y poco a poco se urbaniza la zona y se la dota de todos los servicios. El polígono de Bellvitge es el germen de la aparición de la plaza Europa y de un nuevo centro de negocios-convenciones. En 1964 se construyen toda una serie de bloques de viviendas de bajo coste de alturas alrededor de planta baja más doce con mucha densidad y poca ocupación. Recientemente, con la modernización de la periferia de la ciudad y la consciencia de Hospitalet como puerta de Barcelona desde el aeropuerto se ha llevado a cabo una operación para configurar una nueva centralidad con mezcla de usos: torres que mantienen o superan la altura del polígono, pero que mezclan vivienda, sedes empresariales, hoteles y grandes superficies para eventos.

                                          Barrio de la Biosfera

Mahón ha experimentado crecimientos mucho más lentos que Barcelona y su desarrollo industrial ha sido a una escala muy inferior. Al sur de la ciudad se ha configurado el barrio de la biosfera con vivienda unifamiliar en medianera y un pequeño centro gubernamental con la sede del Consell Insular de Menorca (proyecto de serra + vives + cartagena arquitectes) y una pequeña área comercial. Aunque tienen un carácter bien distinto ambas son formas  de configurar la periferia de una ciudad.


                                          Consell insular de Menorca

CENTROS



    puerta de la muralla de Barcelona en la plaça Nova

El casco histórico de Mahón tiene similitudes con el de Barcelona, como con otras tantas ciudades de fundación romana: un conjunto de calles estrechas y tortuosas construidas en piedra, que le da unidad material, aunque con la huella del colonialismo inglés del siglo XVIII presente en el colorido de algunas fachadas. Entre calles aparecen pequeñas plazas que oxigenan el tejido: la plaza de la constitución con la iglesia de Santa María y el ayuntamiento (donde, igual que en la plaça Sant Jaume, debía encontrarse el foro romano), y la plaza del Carmen con la iglesia del Carmen y el mercado municipal. De la misma forma que el mercado de la Boquería de Barcelona se instala en el antiguo convento de Sant Josep, el mercado del Carmen ocupa el claustro de la iglesia transformando su uso. Estas dos plazas estructuran el espacio público de la ciudad, y entre ellas un conjunto de escaleras y rampas descienden hasta el puerto, en la bajada conocida como “ses voltes”. Como en Barcelona, la ciudad experimentó varios crecimientos y la construcción de dos anillos de murallas: una primera muralla romana ya desaparecida y una segunda medieval del siglo XVI, que conserva parte de su puerta en la plaza Bastión.


    portal de Sant Roc en la plaza Batión

LA MOLA_montjuïc



 


La relación entre la montaña y la ciudad. Estanislau Roca nos trasladó que la imagen que los barceloneses han tenido de Montjuic ha variado a lo largo del tiempo. El símbolo histórico y monumento más antiguo (finales del siglo XVII) es el Castell de Montjuic. A partir de 1714, se instala en él el poder militar bajo el gobierno central de Madrid, y en 1842 y 1843 Barcelona es bombardeada con los cañones del castillo. Durante el siglo XIX es utilizado como lugar de tortura y prisión de víctimas de represión social y de la lucha obrera. Todos estos hechos generan la idea de la montaña como representante del sometimiento de la ciudad a la capital, y en ese tiempo no era vista como un lugar agradable para la ciudadanía. Un vínculo entre arquitectura y poder tan presente en la historia: Hitler y Albert Speer, Tony Blair y la Cúpula del Milenio, Saddam Hussein y sus palacios, Mitterand, Stalin, Rockefeller, etc. (La arquitectura del poder, Deyan Sudjic).




Mahón tiene en frente su propio Montjuic: la fortaleza de la Mola. En la orilla contraria a la ciudad, en la entrada del puerto se encuentra la península de la Mola donde en 1849 Isabel II construyó la fortaleza para defender el puerto, constituir la base de operaciones de todo el Ejército de la isla y servir de reducto de seguridad, en último término, a dicho Ejército. Un paisaje de imponentes muros de piedra caliza define el perfil de la entrada al puerto, configurando todo el conjunto de la fortaleza. Un lugar hoy accesible para visitar las instalaciones y un pequeño museo, pero que permaneció siglos aislado para los menorquines.



MAHÓN_barcelona







Seguramente, Mahón es la ciudad que más he caminado después de Barcelona. Como ciudad mediterránea, su relación con el mar y el agua es muy estrecha. Ni buena ni mala. Estrecha. Se asienta sobre el segundo puerto natural más grande de Europa. El mar penetra en la tierra unos 5Km. Dos caras_el núcleo urbano propiamente dicho se sitúa en la cara sur del puerto. Al ser un puerto tan grande, la mirada hacia el horizonte nunca coincide con el mar, sino que siempre aparece la otra orilla como imagen en el ojo del espectador. El agua se percibe más como una calle transitada por barcos, y no como una extensión infinita (de costa a costa de haber 500m). Sin embargo, estas dos caras son absolutamente asimétricas. La ciudad, a excepción de pequeñas piezas dispersas, nunca ha saltado la otra orilla, de forma que el paisaje ha permanecido prácticamente inalterado desde hace siglos. Dos tiempos_La relación con el agua nunca ha sido siempre la misma. Mahón tiene una posición elevada sobre el mar. El límite entre mar y tierra es casi siempre un acantilado, de manera que el contacto directo con el agua se producía en algunos puntos donde se descendía entre 5 y 15m a través de rampas y escaleras. Obviamente, el mar era un medio de subsistencia, pero la ciudad en sí vivía de espaldas a él y, excepto estos lugares puntuales de descenso la línea de costa era un espacio residual. Un proceso parecido al que vivió la ciudad de Barcelona, donde la costa estaba prácticamente deshabitada, salvo algún gremio de pescadores humildes y asentamientos en barracas. Durante el siglo XX, a raíz del boom turístico y la extensión de la ciudad extramuros, Barcelona se abre al mar y se urbaniza todo el frente marítimo. Dos momentos_En Mahón se construye una plataforma a nivel del agua que recorre prácticamente la totalidad del puerto uniendo todos aquellos puntos de descenso. Ahora, el turista puede caminar por todo el perímetro de Mahón entre el agua y comercios de todo tipo, siempre con la otra cara del puerto como paisaje.



     la otra cara del puerto

dimarts, 4 de juny del 2013

PALO ALTO__FÁBRICA CEMENTO

Justo fue lo que comenté con una compañera el mismo día de la excursión al taller de arquitectura de Ricardo Bofill: que por más bucólico que me pareciese la fábrica de cemento reconvertida en estudio de arquitectura, la verdad es que sus interiores dejaban mucho que desear, sobretodo en lo que a calidad de espacio se refiere. Y aun más sobretodo en comparación con la antigua fábrica de Palo Alto, interiormente transformada, a día de hoy, en un basto espacio libre y confortable, merecedor de luz y tranquilidad con vistas directas a los jardines, albergando estudios básicamente de artistas emprendedores de muy variadas ramas -entre ellos arquitectos también-, que comparten sin embargo unas mismas ideas comunes: rehabilitar para recuperar, a la vez que invertir esfuerzo en rescatar este lugar de trabajo de los inconvenientes de la ciudad.






Este último espíritu de rehabilitar y aprovechar, también se da obviamente en la fábrica de cemento, a la vez que se está recuperando un bello y único edificio que de lo contrario probablemente habría sido destruido.
Mis dudas sin embargo, aparecen al visitar la fábrica por dentro y ver cómo, según mi opinión, se ha forzado demasiado su reconversión de una parte de ella (los cilindros) en despachos de arquitectura, que al final solamente destacan siquiera por la peculiaridad del espacio delimitado interiormente, la disposición de las mesas de trabajo según la forma más idónea acorde con los volúmenes ya preexistentes. Por no hablar de la poca luz artificial de que se dispone...es una lástima, no obstante, no contar con más salas grandes como la de reuniones.