El Parque de las Naciones es
la primera y más reconocida experiencia portuguesa de regeneración integral del
espacio urbano a gran escala. Tiene una superficie de 340 ha, con 5 km por el
margen del estuario del río Tajo. La oportunidad de crear este ambicioso
proyecto viene con la organización de la Expo '98 en Lisboa.
El concepto urbano del Parque de las Naciones constituye una revalorización
de la ciudad con el río. Recuperar el medio ambiente y el paisaje, reconvertir
su uso, asegurar la integración de este espacio en el tejido de la ciudad
fueron los medios que han hecho posible la generación de una nueva centralidad
en el área metropolitana de Lisboa. Un proyecto similar a la Gran Via L'H de
regeneración de una zona industrial y poco estructurada de la ciudad de Barcelona.
El Parque de las Naciones fue ocupado por grandes infraestructuras
industriales, el Matadero Industrial de Lisboa, la Estación de Tratamiento de
Aguas Residuales, el Vertedero y la Estación de Tratamiento de Residuos
Sólidos, además de varias instalaciones portuarias y actividades relacionadas.
En el área inmediatamente al oeste de la línea de ferrocarriles, también se
fueron instalando pequeñas y medianas industrias, de forma poco ordenada
desde el punto de vista de la planificación urbana, y con poca preocupación por
la protección del medio ambiente, lo que provocó la degradación de la zona.
Tuvo una primera fase de urbanización que correspondía a
la planificación y realización de la Expo '98. El proyecto inicial del Parque de
las Naciones ofreció la oportunidad de crear una nueva ciudad, donde la
arquitectura contemporánea es valorada. Los ejemplos son edificios como el
Pabellón de Portugal, el Pabellón Atlántico, el Oceanario, el Teatro Camões, la
Torre Vasco da Gama y la Gare do Oriente.
Gare do Oriente