dimarts, 30 d’abril del 2013

Sanchinarro_22@


Es cierto que su trama, su compacidad, su densidad o incluso que carácter no es el mismo. Pero, sí algo tienen en común el barrio de San Chinarro y el 22@, a sido el espíritu innovador a la hora de probar nuevos sistemas constructivos y tipologías edificatorias.




Si el 22@ partía de una buena idea inicial, en el que aunar empresas punta de BCN y del mundo junto a zonas residencial y acabó quedándose en ni una cosa ni en otra. San Chinarro que empezó como una propuesta arriesgada ha terminado como lo que es. Un barrio olvidado de la periferia al norte de Madrid. Donde la promoción privada a especulado hasta llenar casi toda la zona con sus setitas rojas de obra de fábrica tan repetidas por todo el territorio español, dejando en casi anecdótico los pocos edificios promovidos públicamente y que de verdad han apostado por investigar y promover los nuevos usos de materiales constructivos.
En este sentido Blanca Lleó en colaboración con MVRDV se llevan el premio. Sobretodo la primera. MVRDV proyecto el edificio edificio Mirador, con una fachada con GRC de distintas tonalidad. Pero no puso demasiada atención en la evacuación de sólidos en la parte central superior de su edificio mirador. Que urbanística mira demasiado hacia sí mismo, y se olvida un poco del entorno. Por otra parte, a pocos metros tenemos el edificio de celosía que B. Lleó y MVRDV hicieron juntos. Que lo que más destaca es la brillante y el reflejo del acabado de hormigón que consiguieron fruto de utilizar encofrado de aluminio.


Existen otros edificios de interés constructivo, arquitectónico y urbanístico (como el edificio de viviendas de Brugos y Garridos o las viviendas sociales de Ramón Andrade), os animo a investigar un poco a vosotros por vuestra cuenta!