REFORMANDO LA CIUDAD - CANODROMO
En las ciudades existen
espacios y construcciones de otras épocas, que tenían unos usos diferentes a los
actuales, unos usos que correspondían a su época y que ahora no tienen ninguna
utilidad. Son espacios que se pueden encontrar en partes muy variopintas de la
ciudad, tanto en las afueras como en los nuevos ensanches.
Estos espacios y
construcciones, a medida que pasa el tiempo, se han ido reformando y
reconvirtiendo en nuevas zonas y equipamientos, destinados a cubrir las nuevas
necesidades del barrio en el que se encuentran.
En algunos casos esta
recuperación se ha llevado a cabo, pero en otros casos estos espacios y
edificios siguen sin reformar y se han convertido en zonas sin ninguna utilidad
dentro de la ciudad. Un claro ejemplo de estas diferentes actuaciones se puede
ver al comparar el canódromo de Barcelona y el de Palma de Mallorca.
El canódromo de
Barcelona, situado en el barrio de la Sagrera cerca de Av. Meridiana, se está reconvirtiendo
en un espacio de promoción de la creatividad y la innovación cultural de la
ciudad, de la mano del arquitecto Antonio Bonet, el cual ha realizado el
proyecto de reforma. Además de reformar el edificio el proyecto a dotado al
barrio de una nueva de zona de parque, convirtiendo así al antiguo canódromo en
una nueva zona con una finalidad urbana.
canódromo de Barcelona
canódromo de Palma
En cambio, el canódromo de Palma de Mallorca sigue a la espera de que se le dé un nuevo uso, y mientras espera se ha convertido en un residuo de la ciudad, un vacio por el que nadie ha pasado durante mucho tiempo, una zona llena de maleza y basuras.
En conclusión, el hecho
de reformar los antiguos edificios favorece a la ciudad de dos maneras, la
primera dotando de nuevos equipamientos a la ciudad y la segunda, evitando
crear zonas muertas.